Es un paté de marisco.
Espectacular, excelente en todos sus sentidos. Sí es verdad que tengo que aceptar que soy amante del marisco, no hay ninguna pieza que no me guste; mejillones, patas rusas, langostinos, gambas, centollo, a cualquiera no diría que no. Pero estoy segura que aunque no adoréis el marisco, esta receta os gustará.
Y por eso, esta receta es perfecta para todos. Tiene un rico sabor a marisco, y es perfecto como entrante, tanto en cualquier almuerzo como en cena. Incluso podríais hacerlo para días especiales como Navidad y seguro que triunfáis.
Todo ventajas, fácil y rápido de preparar, y lo mejor de todo es que podréis hacerlo con antelación; ya que de un día a otro mejora mucho más.
¿Queréis apuntaros la receta? Pues allá voy...
-Ingredientes:
1 lata de mejillones al natural
4 anchoas en aceite (preferiblemente en aceite de oliva)
8 palitos de surimi
6 langostinos cocidos
1 huevo duro
2 cucharadas de mayonesa
30 ml de vino fino seco (aconsejable vino fino de Jerez)
1 paquete de biscotes minis; también podéis optar por hornear pan (sería al gusto del comensal)
La elaboración es muy sencilla:
Batir los mejillones escurridos, las anchoas, 4 palitos de surimi y 4 langostinos todo muy bien.
Cuando lo tengáis listo añadir el vino, la mayonesa y remover hasta que todo esté completamente ligado.
Picar muy bien el huevo duro y los palitos de surimi que no hemos usado antes. Añadir a la mezcla y volver a remover. Dejar reposar al menos 4 horas en la nevera guardado en un tupper (en el caso que no lo preparéis el díá anterior)
Antes de servir, colocar los dos langostinos para adornar el plato, así evitaremos que los langostinos se sequen.
Y ¡¡listo!! a disfrutar de ello...
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