Desde que estoy por tierras inglesas aún no había subido ninguna receta dulce al blog. Y no porque no las haga, sino porque apenas saco algún ratito para cocinar, y no tengo ni tiempo ni luz para hacer foto medio decentes para enseñároslas. Pero hoy, fuese como fuese tenía que pasaros esta receta.
Ha sido una adaptación al típico y famoso bizcocho 1, 2, 3, en el que quería experimentar para lograr un bizcocho muy muy esponjoso, sin lactosa, de chocolate negro y no demasiado dulce ni grasiento.
Para ello os mostraré ingredientes que he usado, y podréis ver que he conseguido 100% lo que quería. Todos han querido repetir, así que eso ha sido muy buena señal, ¿verdad?
-Ingredientes (con la medida de un yogurt de 125 g)
Un yogur sin lactosa de vainilla
Un vaso de chocolate negro a la taza en polvo y sin azúcar
Un vaso de azúcar (yo he usado caster sugar, es más fina que el azúcar normal, pero podéis usar la que tengáis en casa)
3/4 vaso de aceite de girasol
1/2 vaso de agua a temperatura ambiente y 1/2 vaso de leche sin lactosa semidesnata
3 huevos M
3 vasitos de harina
1 cucharada de levadura
120 gr de frutos secos (yo he usado nueces pecanas, nueces de Brasil, nueces normales y almendras) Pero podéis elegir solo una de ellas, u otra que os guste
Mantequilla sin lactosa y un poco de harina para engrasar el molde
-Elaboración:
Precalentaremos el horno a 170º arriba y abajo con aire.
Batimos los huevos enérgicamente con el azúcar tamizada hasta doblar su volumen. Eso hará que quede extra esponjoso. Reservamos.
En un bol grande ponemos el yogur y el aceite, removemos con unas varillas, añadimos el agua y la leche y volvemos a batir hasta conseguir burbujas.
A esta mezcla le añadimos los huevos con el azúcar poco a poco para que no se baje la masa.
Ahora pondremos el chocolate negro, la harina y la levadura en tres tandas, y todo previamente tamizado. Hará que la masa quede más fina y aireada.
Por último añadir los frutos secos, reservando algunos para decorar el bizcocho por arriba.
Engrasamos un molde de 22 cm con mantequilla sin lactosa y harina. Podéis optar también por poner papel de horno (yo escogí engrasarlo porque quería un bizcocho crujiente por fuera y esponjoso por dentro y cuando pongo papel de horno el bizcocho queda húmedo tanto por fuera como por dentro)
Ponemos la masa de bizcocho en el molde, decoramos con los frutos secos restantes y horneamos durante 45 minutos. Haciendo siempre la prueba del palillo para ver si está totalmente cocido.
Como véis quedó extra esponjoso, duplicó su volumen, nada grasiento, no excesivamente dulce, y con un sabor delicioso a chocolate negro. Así que prueba superada con creces.
Espero que a vosotros os guste también y lo probéis...
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