Buenas!! Ya está aquí otra vez la de los cheesecakes!! Pero no lo he podido evitar, si es que tengo hasta buena excusa, ¡¡dejadme que os cuente!!
Hace unos días, visitando algunos blogs que sigo, llegué hasta el Reto Alfabeto dulce, en el que mensualmente hay que hacer una nueva receta, siempre dulce, claro, con dos ingredientes que hayan elegido dos de las compañeras del grupo. No dudé en escribir a mi tocaya Ana, para informarme y para saber si podía apuntarme. Me gustaba la idea, y estaba segura que lo pasaría bien. Rápidamente me contestó explicándome todo y aceptándome en el grupo. Cruzando los dedos estaba para que no tocara algo muy difícil en mi primer mes.
¿¿Ya podéis adivinar lo que salió?? La P y la D, con lo que eligieron Plátano y Dulce de leche... ¡¡vaya elección!!
Hacía mil años que tenía ganas de hacer algo con ambos ingredientes, y justo me animo al reto y eligen estos dos ingredientes, ¿será el destino? ¡¡Quiero creer que sí!!
Al final dándole mil vueltas a la cabeza, entre minivasitos, helados, tartas, cupcakes, se me ocurrió hacer este cheesecake. Todas las demás opciones tenían sus pros y sus contras, y ésta, la elegida, todo ventajas...
Así que me dispuse ¡¡manos a la obra!!
Ei ¿y vosotros qué, me acompañáis?
Ei ¿y vosotros qué, me acompañáis?