¡¡¡¡Aquí estoy de nuevo con una receta dulce!!!!
Me he propuesto iros enseñando recetas alternando dulces y saladas, y como mi último post fue el de las croquetas de carne y jamón, hoy toca receta dulce...
¿Y qué mejor que ésta que os traigo?
Es una receta que tenía pendiente desde principios de año, así que ya era hora que me atreviera, ¿ó no?
Con ésto quiero animaros a prepararla, porque no os arrepentiréis. Son unos bollitos muy tiernos, esponjosos, con un sabor acaramelado y un aroma a canela que enamora.. ¡¡¡Mmmm!!!!
¡¡Ah!! Y comentaros que fue la receta elegida para mi reto de Suecia en "Reto 52 weeks", Y ya aprovechando el reto de Sakura, por supuesto tenía que usar su receta. Así, creo que es la mejor forma de agradecerle todo lo que estoy aprendiendo (no sólo cocinerilmente hablando)...
Ya presentada esta receta, y habiendo dado las gracias a quien las merece... paso a detallaros todo..
-Ingredientes para un molde de 20 cm (redondo)
Para la masa:
234 gr de harina (yo usé panificable) + 15 gr (amasado)
5 gr de levadura fresca
65 gr de leche entera + 1 chorrito para pincelar antes de hornear
67 gr de huevo (podéis usar un huevo L)
25 gr de mantequilla sin sal
25 gr de azúcar blanquilla
1/2 cucharadita de canela molida
1 pizca de sal
Para el relleno:
50 gr de azúcar moreno
40 gr de mantequilla fría
14 gr de harina
2 cucharaditas de canela molida
-Elaboración:
Comenzaremos preparando la masa. Como no tengo amasadora, os cuento la forma de hacerlo todo a mano.
Para ello mezclamos la mantequilla (yo la tenía a temperatura ambiente), el azúcar, la canela, la sal y la leche. Batí con unas varillas manuales hasta conseguir una mezcla homogénea, tardará un poquito, no os preocupéis. Añadir el huevo y volver a remover.
Ahora deshacemos la levadura con la mitad de la harina (es decir con 117 gr), y la vamos poniendo en el bol donde teníamos la mezcla líquida . Yo usé una cuchara de madera, me era más fácil de ir incorporando la harina y a la vez ir removiendo todo para que se integraran todos los ingredientes perfectamente.
Cuando terminemos con la mitad de la harina iremos poniendo el resto que teníamos reservada. Hacedlo poco a poco e id viendo cómo la textura de la masa se va volviendo cada vez más fina y elástica.
Cuando hayamos terminado con la harina, dejaremos unos 5 minutos la masa reposando.
La sacamos del bol y con los 15 gr que dejamos reservamos la ponemos en la encima y amasamos con fuerza.. Estaremos 5-7 minutos.
Cogemos un bol, lo pincelamos con aceite y dejamos la masa tapada durante 1 hora al menos, yo la dejé hora y media aproximadamente. Recordad que la debéis de dejar en un lugar que no haya corrientes de aire.
Unos 10 minutos antes de que termine la masa de levar, prepararemos el relleno. Para ello mezclamos los 4 ingredientes hasta formar una especie de arena.
Cogemos la masa, quitamos el aire y con un rodillo la hacemos con forma de rectángulo. Ponemos el relleno, y enrollamos por la parte más larga. Cortamos con un cuchillo bien afilado los rollitos, de unos 3 cm aproximadamente.
Yo lo puse en un molde redondo de 20 cm, porque quería que quedara con forma de tarta. Al molde le puse una capa muy fina de mantequilla y lo enhariné, así hacía que la masa no se quedara pegada al molde.
Vamos disponiendo todos los rollitos en el molde, separaditos unos de otros, ya que tenemos que esperar un segundo levado y volverán a crecer. Ya veréis como cuando leven, se unirán unos a otros.
Volvemos a tapar con un trapo, y dejamos levar durante 2 horas. Si hace mucha calor en casa, con hora y media tendréis suficiente, eso dependerá de la temperatura ambiente del día.
10 minutos antes de terminar el levado, se precalienta el horno a 200º. Pincelamos los rollitos con leche y lo metemos durante 20 minutos. Yo lo puse en el centro del horno, con calor arriba y abajo (también ventilador, ya que mi horno no tiene opción a quitarlo).
Dejar templar durante unos 10 minutos y traspasar con cuidado a una rejilla donde terminará de enfríar.
Si tenéis paciencia, disfrutadlos fríos, sino, probadlos templaditos... están super ricos...
Y éste es el momento que más me gusta, "momento mordisco" para enseñaros perfectamente un primer plano de su interior caramelizado...
¿Buena pinta, no?
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